Una de las cosas que hecho de menos en Empire, es aquella evaluación inicial sobre la dificultad inherente a cada facción. Por ejemplo, el primer Medieval te ponía la campaña egipcia como fácil, y la alemana como difícil, dependiendo de las provincias iniciales, su riqueza, el tipo de vecindario, las unidades propias, etc.
A mi me gusta poder ajustar la dificultad del juego a mi propia capacidad: si la campaña es demasiado fácil, me aburro, si es demasiado difícil me frustro, al no poder progresar en mis objetivos mientras todas las facciones me machacan una y otra vez.
Yo he elegido Rusia para empezar, pues he visto que tenía muchas provincias y las espaldas guardadas (por el Este se acaba el mapa, je, je...). en realidad le tengo más ganas a la campaña inglesa o la francesa, pero será para la próxima campaña, prefiero desvirgarme en una campaña que me “importe” menos.
Supongo que muchos de vosotros ya habéis jugado varias campañas, ¿cuáles os han parecido más fáciles o difíciles?